¿Me puedes cuidar los niños? Muchos hijos cuando crecen, sólo se acuerdan de sus padres en las fechas especiales del año y el resto del año sólo los buscan cuando necesitan algo. Estas son las frases que los padres oyen con frecuencia: ¿Me puedes prestar dinero? ¿Me puedes cuidar los niños? ¿Puedo usar tu automóvil? Pero son muy pocas las veces que los hijos, despues que crecen, buscan a sus padres para darles cariño, compañia y compartir con ellos momentos especiales, que hagan sentir a sus padres apreciados y amados. Ningún padre es perfecto, pero la gran mayoría hizo grandes esfuerzos por sus hijos y al final de la vida, el único premio que cuenta, es un hijo agradecido. Lamentablemente, esa es la misma actitud que tenemos con Dios. Nunca nos acordamos de nuestro Padre celestial y sólo lo buscamos cuando queremos pedirle algo. ¿Cuántas veces buscamos a Dios sólo para disfrutar de su compañia, decirle cuando lo amamos y lo agradecidos que estamos con Él por todo lo que ha hecho por nosotros? Jesús nos dijo que debíamos amar a Dios con todo nuestro corazón, con toda nuestra alma, con toda nuestra mente y con todas nuestras fuerzas. Por favor, ama a tu Padre celestial y a tus padres biológicos.
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