Felicidades

¡Felicidades. Te damos la bienvenida a nuestro equipo!: A José le llegó una carta donde lo invitaban a formar parte del equipo de fútbol de su ciudad. José estaba contento y orgulloso de haber sido seleccionado, porque ese era su sueño. Esta misma alegría, es la que sentimos todos cuando se cumplen nuestros sueños y nos invitan a formar parte de un equipo profesional, corporativo, académico, político, o de cualquier otra naturaleza. Y eso está muy bien, porque representa el logro de una meta y un sueño hecho realidad. Lo triste es que muy pocas personas sueñan con pertenecer al equipo del Reino de Dios, no muestran interés en participar y a pesar de que "todos" somos invitados, eso no causa ni alegría, ni orgullo. Dios quiere que todos seamos parte de su equipo, y siempre esta enviando mensajes para que nos involucremos en su Reino. Formar parte del equipo de Dios es una de las experiencia más emocionantes en nuestra vida y tiene el mejor plan de beneficios tanto en la tierra como en el cielo. Beneficios que ningún hombre puede ofrecer. Espero sientas felicidad y orgullo de haber recibido este mensaje, es el mejor que recibirás en toda tu vida.