No Mires Atrás. Las personas cambiamos y los factores que nos hacen cambiar son internos y producidos por la edad, la madurez, los aprendizajes y las experiencias. Pero, también hay cambios externos en nuestro entorno y en las circunstancias que nos rodean. Esos cambios externos también producen cambios internos en nosotros, porque necesitamos adaptarnos a las nuevas condiciones externas.
El problema está en que a veces estamos tan anclados en el pasado, que no aceptamos los cambios del presente, no hacemos los ajustes internos necesarios para adaptarnos y vamos por la vida mirando hacia atrás. Esa actitud, nos quita la flexibilidad para adaptarnos a las nuevas circunstancias.
¿Cuál es la solución? No mires atrás. Deja atrás tu pasado porque te impide avanzar y progresar. Aprende a aceptar los cambios porque presentan oportunidades de progreso que se pierden al no aceptarlos. Hablando sobre dejar el pasado atrás, Jesús dijo: El que pone la mano en el arado y luego mira atrás no es apto para el reino de Dios. Lucas 9:62
Hoy tienes la oportunidad de decidir. Puedes quedarte anclado en el pasado o soltar el ancla y avanzar con fuerza hacia adelante, sin mirar atrás.
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