¿Paz Para Quién? Pasamos unas lindas navidades, gracias a Dios. Sin embargo, hay lugares en el mundo donde en estas fechas, hubo confrontación y guerra. En esos lugares, soldados y personas de la población común, pasaron esta temporada, rodeados de enfrentamientos y agresiones, que producen heridas físicas y emocionales. Parece que la guerra es parte de nuestro pasado, presente y futuro. De hecho, es parte de lo que revelan las profesías. Nuestra única opción ante esta terrible realidad es orar. Oremos por las personas afectadas por la guerra, por todos los ancianos y niños que sufren, por todos aquellos que pierden seres queridos. Jesús dijo que Dios bendice a los que procuran la paz, porque serán llamados hijos de Dios y tambien dijo que nos dejaba el regalo de la paz en la mente y en el corazón. Pidámosle a Jesús, El Príncipe de Paz, que esa paz que el mundo no puede dar, Él la regale a los que padecen las consecuencias de la guerra, para que ellos tengan paz en sus mentes y corazones. Juan 14:27 y 16:33.
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