La mente humana no podía realmente llegar comprender lo grande y poderoso que es Dios. La Biblia dice que la grandeza de Dios es de tal magnitud, que todo el universo no puede contenerlo. El ser humano podía leer sobre Su Amor, Lealtad, Fidelidad, Inmensidad, Poder, Bondad, Justicia, Gloria, Esplendor, Verdad, Inteligencia y Ternura. Pero no podía comprenderlo ni imaginarlo. No era posible llegar a contener en la mente humana el concepto de "Dios".
Dios vino al mundo para explicarnos directamente y enseñarnos Su Amor, ajustado a nuestra capacidad de comprensión. Nuestro Padre celestial se quitó Su Divinidad y nació en nuestra tierra como Jesús, el Hijo del Hombre, el Hijo de Dios, para que viéramos cómo es Dios. Por medio de Jesús, Él nos transmite Su propio Amor, la más clara visión de Su sustancia, lo que nos manda a hacer y el camino para la salvación. Tan grande es nuestro Padre celestial, que hizo todo eso por nosotros. Sin embargo, parece que todavía no hemos comprendido. Porque deberíamos seguir a Jesús, obedecerlo y entregarnos a Él. Pero, no lo hacemos.
Dios ya hizo su obra y está culminada. Ahora es tu responsabilidad hacer tu parte. Busca tu propósito de vida y persevera hasta lograrlo.
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