Tu sabes lo importante que son las relaciones personales y los beneficios que te pueden dar en todos los aspectos de tu vida. Sin embargo, tu estilo de vida actual, atenta contra el desarrollo de esas vitales relaciones personales y tienes que esforzarte para conectarte con las personas que te rodean.
Los miembros de tu familia, tus vecinos, tus compañeros de trabajo, y todos los que en algún momento están cerca de ti, son relaciones personales que al desarrollarlas te mantendrán conectado con la verdadera realidad, te ayudarán a potenciar tu propio ser y maximizarán tus logros personales aunque tu no lo comprendas ahora.
La soledad no es parte del plan de Dios. Fuiste creado para relacionarte y como primer paso debes buscar tener una relación personal íntima con tu Padre celestial, porque esa es tu principal y prioritaria relación personal. Desarrolla primeramente tu relación personal con Dios. Una vez que estableces esa conexión con su Espíritu, las cadenas que te atan se romperán y estarás preparado para desarrollar tus relaciones personales con el prójimo.
Por esa razón, enfoca tu mente en tu Padre celestial y evita cualquier distracción que aparte tu mente de Él y te impida escuchar su voz dentro de ti. Tu Padre te llevará hacia las personas.
La soledad no es parte del plan de amor de Dios. Él quiere que vivas interrelacionado y complementándote, en ayuda mutua con tu prójimo.
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