¿Qué buscas en la vida? Las cosas que haces ¿Por qué las haces? ¿Para qué las haces? Puedes tener diferentes motivaciones como: fama, figuración, popularidad, poder, dinero, diversión, etc. Sin embargo, las personas más ejemplares, son las que se limitan a hacer lo que hay que hacer, sin importar si es popular o no. Sin importar si no logran fama, poder y dinero, de todas maneras, hacen lo que hay que hacer. Este es el tipo de persona que acuden cuando se les pide ayuda y siempre están dispuestas a servir.
Si realmente quieres ayudar y servir, siempre harás lo que sea necesario Este tipo de actitud requiere de mucho amor, porque es lo único que puede motivarte a ir a donde sea, en cualquier momento y hacer lo que sea, por cualquiera.
El Señor no te evalúa por tus logros, talentos, conocimientos o bondad. Él evalúa las motivaciones de tu corazón y lo que mejor calificación se lleva, es el amor y la humildad, en el servicio a los demás. Esas cualidades hacen que siempre tengas disposición para servir, aun en las cosas más pequeñas. Servir a tu prójimo incluye a tu cónyuge, hijos, familia, vecinos y todo aquél que esté a tu lado en un momento dado.
El servicio que Dios te pide, es hacer por tu prójimo lo que debes hacer, por amor y sin buscar recompensa.
Eso es lo que te enseñó Jesús con Su Ejemplo.
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