martes, 23 de noviembre de 2010

Garantía Escrita

 
Hoy en día, los fabricantes y comerciantes están obligados a darles a sus clientes una garantía por escrito que detalla claramente los derechos del comprador en caso de que el producto comprado este defectuoso o no cumpla con todos los beneficios que el fabricante promete. Todo comprador debería leer las condiciones de garantía antes de finalizar la compra de un producto o servicio, para estar seguro de la protección que tiene. La garantía es importante, porque las leyes obligan a los fabricantes y comerciantes a cumplir con lo que está escrito en la garantía. La mayoría de las empresas serias ponen gran empeño en cumplir con sus garantías y no es necesario obligarlos a cumplir con la amenaza de denunciarlos ante los organismos competentes. Estas empresas actúan así porque necesitan cuidar su reputación para lograr la confianza de sus clientes.

De igual manera ocurre con nuestro Padre celestial. Él nos ha dejado por escrito y con el respaldo de Su palabra, la garantía de sus promesas. Todo lo que Él nos ha prometido, lleva Su sello de garantía por escrito y Él nunca comprometería su esencia de amor y verdad. Así que, si Él nos prometió algo, ¡no lo pongamos en duda! Y si no estamos claros en algo, sólo vayamos a Su palabra escrita y veamos la garantía que nos dejo y así podremos decirle: Señor, Tú lo prometiste, así que, yo se que lo cumplirás. Sin embargo, es importante distinguir entre “Persuasión y Fe”. La “Persuasión” es una creencia casi mística de que lo que uno desea profundamente, sucederá. Mientras que la “Fe” es la confianza en algo que ha sido prometido con el respaldo de una garantía que le da validez, aunque aún no podamos ver lo que nos ha sido prometido.
 
Por eso es importante recordar que no debemos guiarnos por vista sino por fe, teniendo la plena seguridad de que vamos a recibir lo que El Señor nos ha prometido con Su garantía escrita. Debemos estar convencidos de la realidad de todas Sus promesas aunque no podamos verlas todavía.

Salmos 50:15
Llámame cuando estés angustiado; yo te libraré, y tú me honrarás.

Mateo 11:28
Vengan a mí todos ustedes que están cansados de sus trabajos y cargas, y yo los haré descansar.

Mateo 28:20
Por mi parte, yo estaré con ustedes todos los días, hasta el fin del mundo.
 
Juan 14:27
Les dejo la paz. Les doy mi paz, pero no se la doy como la dan los que son del mundo. No se angustien ni tengan miedo.

Juan 16:33
Les digo todo esto para que encuentren paz en su unión conmigo. En el mundo, ustedes habrán de sufrir; pero tengan valor: yo he vencido al mundo.

Romanos 10:11
La Escritura dice: El que confíe en él, no quedará defraudado.
 
Romanos 10:17
Así pues, la fe nace al oír el mensaje, y el mensaje viene de la palabra de Cristo.

Filipenses 4:19
Por lo tanto, mi Dios les dará a ustedes todo lo que les falte, conforme a las gloriosas riquezas que tiene en Cristo Jesús.
 
Hebreos 11:1
Tener fe es tener la plena seguridad de recibir lo que se espera; es estar convencidos de la realidad de cosas que no vemos.
 
 
 
Los versículos de la Biblia citados, son de la versión: Dios Habla Hoy.

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Mateo 10:8b
Ustedes recibieron gratis este poder; no cobren tampoco por emplearlo.
1 Pedro 4:10
Como buenos administradores de los diferentes dones de Dios, cada uno de ustedes sirva a los demás según lo que haya recibido.
2 Juan 1:8
Tengan ustedes cuidado, para no perder el resultado de nuestro trabajo, sino recibir su recompensa completa.

 

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