lunes, 13 de septiembre de 2010

¿No Podemos o No Queremos?

El Señor nos dice con frecuencia: ¿No aprenderán a obedecer mis palabras?
 
El problema con la enseñanza es que muy frecuentemente los alumnos no aprenden, no porque no puedan, sino porque no les interesa la enseñanza y por lo tanto, no quieren aprender. Sin embargo, en esta vida, El Señor es nuestro Maestro, para que aprendamos el camino a la vida eterna en el cielo y pareciera que eso no nos interesa y no quisiéramos aprender. ¡Increíble pero cierto!
 
Si leemos la palabra del Señor, con la actitud y disposición de corazón de aprender, todos los misterios que hay en la palabra y en la voluntad del Señor para Su pueblo, se revelan. Todas esas maravillas y tesoros de conocimientos ocultos en la Biblia se pueden aprender con los medios sobrenaturales que El Señor ha provisto para los que tienen la actitud correcta y positiva de aprender. El nos regala todo eso.
 
Es posible que algunos siempre estén, aparentemente, tratando de aprender. Sin embargo, nunca pueden llegar al conocimiento de la verdad. Pero la falta no está en la palabra del Señor. Esas personas pueden ser ignorantes voluntarios.
 
En Jesús tenemos el mejor Maestro. Aprendamos de nuestro Maestro.
 
Deuteronomio 30:11-14
Este mandamiento que hoy les doy no es demasiado difícil para ustedes, ni está fuera de su alcance. No está en el cielo, para que se diga: ¿Quién puede subir al cielo por nosotros, para que nos lo traiga y nos lo dé a conocer, y lo pongamos en práctica? Tampoco está del otro lado del mar, para que se diga: ¿Quién cruzará el mar por nosotros, para que nos lo traiga y nos lo dé a conocer, y lo pongamos en práctica? Al contrario, el mandamiento está muy cerca de ustedes; está en sus labios y en su pensamiento, para que puedan cumplirlo.
 
Salmos 32:8
El Señor dice: Mis ojos están puestos en ti. Yo te daré instrucciones, te daré consejos, te enseñaré el camino que debes seguir.
 
Mateo 4:4
Pero Jesús le contestó: La Escritura dice: No solo de pan vivirá el hombre, sino también de toda palabra que salga de los labios de Dios.
 
Mateo 11:25
En aquel tiempo, Jesús dijo: Te alabo, Padre, Señor del cielo y de la tierra, porque has mostrado a los sencillos las cosas que escondiste de los sabios y entendidos.
 
Mateo 13:14-16
Así, en el caso de ellos se cumple lo que dijo el profeta Isaías: Por más que escuchen, no entenderán, por más que miren, no verán. Pues la mente de este pueblo está entorpecida, tienen tapados los oídos y han cerrado sus ojos, para no ver ni oír, para no entender ni volverse a mí, para que yo no los sane. Pero dichosos ustedes, porque tienen ojos que ven y oídos que oyen.
 
Mateo 15:6b
Así pues, ustedes han anulado la palabra de Dios para seguir sus propias tradiciones.
 
Mateo 16:17
Entonces Jesús le dijo: Dichoso tú, Simón, hijo de Jonás, porque esto no lo conociste por medios humanos, sino porque te lo reveló mi Padre que está en el cielo.
 
Mateo 24:35
El cielo y la tierra dejarán de existir, pero mis palabras no dejarán de cumplirse.
 
Marcos 7:13
De esta manera ustedes anulan la palabra de Dios con esas tradiciones que se trasmiten unos a otros. Y hacen otras muchas cosas parecidas.
 
Marcos 13:31
El cielo y la tierra dejarán de existir, pero mis palabras no dejarán de cumplirse.
 
Lucas 10:21
En aquel momento, Jesús, lleno de alegría por el Espíritu Santo, dijo: Te alabo, Padre, Señor del cielo y de la tierra, porque has mostrado a los sencillos las cosas que escondiste de los sabios y entendidos. Sí, Padre, porque así lo has querido.
 
Lucas 21:15
Porque yo les daré palabras tan llenas de sabiduría que ninguno de sus enemigos podrá resistirlos ni contradecirlos en nada.
 
Lucas 21:33
El cielo y la tierra dejarán de existir, pero mis palabras no dejarán de cumplirse.
 
Lucas 24:45
Entonces hizo que entendieran las Escrituras.
 
Juan 1:14
Aquel que es la Palabra se hizo hombre y vivió entre nosotros. Y hemos visto su gloria, la gloria que recibió del Padre, por ser su Hijo único, abundante en amor y verdad.
 
Juan 3:34
Pues el que ha sido enviado por Dios, habla las palabras de Dios, porque Dios da abundantemente su Espíritu.
 
Juan 6:68
Simón Pedro le contestó: Señor, ¿a quién podemos ir? Tus palabras son palabras de vida eterna.
 
Juan 8:31-32
Jesús les dijo a los judíos que habían creído en él: Si ustedes se mantienen fieles a mi palabra, serán de veras mis discípulos; conocerán la verdad, y la verdad los hará libres.
 
Juan 8:43
¿Por qué no pueden entender ustedes mi mensaje? Pues simplemente porque no pueden escuchar mi palabra.
 
Juan 8:47
El que es de Dios, escucha las palabras de Dios; pero como ustedes no son de Dios, no quieren escuchar.
 
Juan 8:51
Les aseguro que quien hace caso de mi palabra, no morirá.
 
Juan 12:38
Pues tenía que cumplirse lo que escribió el profeta Isaías: Señor ¿quién ha creído nuestro mensaje? ¿A quién ha revelado el Señor su poder?
 
Juan 14:23
Jesús le contestó: El que me ama, hace caso de mi palabra; y mi Padre lo amará, y mi Padre y yo vendremos a vivir con él.
 
Juan 17:6
A los que escogiste del mundo para dármelos, les he hecho saber quién eres. Eran tuyos, y tú me los diste, y han hecho caso de tu palabra.
 
 
 
Los versículos de la Biblia citados, son de la versión: Dios Habla Hoy.
 
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Mateo 10:8b
Ustedes recibieron gratis este poder; no cobren tampoco por emplearlo.
1 Pedro 4:10
Como buenos administradores de los diferentes dones de Dios, cada uno de ustedes sirva a los demás según lo que haya recibido.
2 Juan 1:8

Tengan ustedes cuidado, para no perder el resultado de nuestro trabajo, sino recibir su recompensa completa. 

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