¿Buscas La Belleza?
¿Cuál es la belleza que llama la atención? ¿Es un cuerpo perfecto? ¿Facciones atractivas? ¿Piel hermosa? ¿Cabello bello y sedoso? En nuestra cultura actual se busca mucho ese tipo de belleza y las personas dedican mucho tiempo, energía y dinero tratando de mejorar y embellecer estas características mediante dietas, ejercicios, tratamientos especiales y cirugía estética. Para comenzar todas esas características son efímeras e inevitablemente desaparecen con la edad. Es como dedicar mucho tiempo, recursos y esfuerzos en buscar un tesoro que un tiempo después de obtenerlo se desintegrará y desaparecerá.
Además, esa es una cultura muy superficial porque se está cultivando una belleza externa y solo se piensa en embellecer la envoltura exterior. ¿Cómo está la salud interna de los órganos de estas personas que cultivan su belleza interna? Si cuidan sólo la envoltura por vanidad pero descuidan su salud física, pueden llegar a la muerte en medio de su belleza exterior. En ese caso la persona es bella por fuera y fea por dentro. Por ejemplo, ¿Es correcto hacerse una cirugía estética y continuar fumando? ¿Trotar y tener una dieta desbalanceada? ¿Hacer levantamiento de pesas sin hacer ejercicios aeróbicos? ¿Tiene eso sentido? ¿Es esto una cultura que debemos cultivar?
Pero más importante aún, ¿Cómo está la salud espiritual? ¿Sabe la gente como cultivar la salud espiritual? ¿Se conocen las consecuencias de una mala salud espiritual? No mucho, porque nuestra cultura no promueve esos valores. ¿Será posible que cultivar la salud espiritual mejore la apariencia y la salud física, independientemente de la edad? ¿Todas esas personas que cultivan la belleza externa y que la buscan también en el sexo opuesto, están informados sobre las consecuencias de descuidar su salud espiritual y pueden reconocer la belleza espiritual? ¿Saben cómo será la vida al lado de una pareja que está espiritualmente enferma?
Por sobre todas las cosas busca tu salud espiritual. ¿Conoces a Jesús?
Veamos que nos dicen los Proverbios
No te creas demasiado sabio; honra al Señor y apártate del mal: ¡esa es la mejor medicina para fortalecer tu cuerpo! (3:78)
Atiende a mis palabras, hijo mío; préstales atención. Jamás las pierdas de vista, ¡grábatelas en la mente! Ellas dan vida y salud a todo el que las halla. Cuida tu mente más que nada en el mundo, porque ella es fuente de vida. (4:2023)
La mente tranquila es vida para el cuerpo, pero la envidia corroe hasta los huesos. (14:30)
Los ojos radiantes alegran el corazón; las buenas noticias dan nuevas fuerzas. (15:30)
Las palabras dulces son un panal de miel: endulzan el ánimo y dan nuevas fuerzas. (16:24)
Buen remedio es el corazón alegre, pero el ánimo triste resta energías. (17:22)
Mateo 23:27
¡Ay de ustedes, maestros de la ley y fariseos, hipócritas!, que son como sepulcros blanqueados, bien arreglados por fuera, pero llenos por dentro de huesos de muertos y de toda clase de impureza.
1 Pedro 3:34
Que el adorno de ustedes no consista en cosas externas, como peinados exagerados, joyas de oro o vestidos lujosos, sino en lo íntimo del corazón, en la belleza incorruptible de un espíritu suave y tranquilo. Esta belleza vale mucho delante de Dios.
Isaías profetizando sobre Jesús dijo:
¿Quién va a creer lo que hemos oído? ¿A quién ha revelado el Señor su poder? El Señor quiso que su siervo creciera como planta tierna que hunde sus raíces en la tierra seca. No tenía belleza ni esplendor, su aspecto no tenía nada atrayente; los hombres lo despreciaban y lo rechazaban. Era un hombre lleno de dolor, acostumbrado al sufrimiento. Como a alguien que no merece ser visto, lo despreciamos, no lo tuvimos en cuenta. (53:13)
Finalmente leamos que nos dice Santiago con respecto a la vanidad de la vida
Ahora oigan esto, ustedes, los que dicen: Hoy o mañana iremos a tal o cual ciudad, y allí pasaremos un año haciendo negocios y ganando dinero, ¡y ni siquiera saben lo que mañana será de su vida! Ustedes son como una neblina que aparece por un momento y en seguida desaparece. Lo que deben decir es: Si el Señor quiere, viviremos y haremos esto o aquello. (4:13-15)
Los versículos de la Biblia citados, son de la versión: Dios Habla Hoy.
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