sábado, 19 de julio de 2014

Cuida Tu Balance

¿Te pasa esto a ti?: El logro de tus metas profesionales y financieras, consume todo tu tiempo disponible y no te queda tiempo para amar. ¿Cierto? Por eso, aunque estás creciendo en tu área profesional y financiera, tu vida languidece y a pesar de tu éxito, sientes un gran vacío en tu interior. ¡Recapacita! Jesús te enseñó que debías amar al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma y con toda tu mente y amar a tu prójimo como a ti mismo. Dios sólo te mandó a amar. El problema es que tu lucha por llegar a tus metas personales, no te deja tiempo para amar. Por eso avanzas en la vida, pero colapsas en tu interior. Tu persona crece pero tu espíritu se debilita. Cambia tus prioridades. Cumple primero con las especificaciones de tu Creador y entonces tus metas personales tendrán sentido y estarán alineadas con el Gran Propósito de Dios. Dios te ama y te creó para que tú lo amaras a Él y a tu prójimo. Amar a todo el mundo, hasta a tus enemigos, es muy difícil. Sin embargo, comienza a relacionarte con Dios y Él te enseñará a amar. Tu vacio interior desaparecerá y tendrás una vida abundante. #sigueajesus

martes, 1 de julio de 2014

Eres Un Original, No Una Copia

Por favor, no cometas el error de tratar de ser como otras personas. Quizá admiras cierto tipo de personas por su aparente popularidad, éxito o belleza. Sin embargo, no debes tratar de imitar a esas personas y ser diferente de lo que eres. Las corrientes culturales te arrastran a creer en ciertos prototipos del éxito. Pero lo que ves en otros es sólo la parte exterior o sólo una faceta de su vida, sin ver el entorno completo. Recuerda el dicho popular: no es oro todo lo que brilla. El asunto es que el plan que Dios tiene para otros, no es el plan que Dios tiene para ti. Dios te creó como eres y tiene un propósito único y especial para ti. Sigue tu propósito que está grabado por Dios en tu corazón y no permitas que la oscuridad del mundo, apague la luz que Dios ha puesto en ti, transformándote en una copia, en lugar del original creado por Dios. Jesús te dice en Mateo 10:30, que Dios tiene contado cada cabello de tu cabeza, porque tienes mucho valor para Él.

Sigue el propósito que Dios puso en tu corazón y lograrás el destino único que Dios tiene para ti.