El mundo ofrece muchos refugios para la solución de tus problemas cotidianos, donde se entra rápido y fácil. Ahí puedes refugiarte de la obecidad, la calvicie, las manchas, la falta de condiciones físicas, el envejecimiento, etc. Siempre son soluciones instantáneas y fáciles. Pero nunca te dicen la verdad. Porque no funcionan o sólo sirven temporalmente.
El mundo también te ofrece refugios para protegerte de depresión, soledad, temor, angustia, tristeza, impaciencia, infidelidad, desesperanza y el descontrol. Los refugios que ofrece el mundo para protegerte y escaparte de esos males, son igualmente instantáneos y fáciles, por eso, muchas personas entran en refugios de droga, alcohol, sexo ilícito, apuestas, ocio, pornografía, televisión, internet y otros parecidos.
Estos refugios instantáneos y fáciles de acceder, no proveen una solución verdadera ni permanente. Más bien se convierten en vicios que te llevan a destrucción y esclavitud. Tu usas esos vicios como refugio, para evadir la realidad y las circunstancias adversas, y terminas destruyendo tu vida, la de tu familia y de todo lo importante que has tratado de construir.
Entrar en los refugios del mundo es rápido y fácil, pero no duran mucho y sales de ellos como un esclavo. Para entrar en los refugios de Dios tienes que esforzarte y toma más tiempo, pero son permanentes y sales de ellos totalmente libre.
¿Tienes problemas y buscas una solución? ¿Quieres las soluciones instantáneas y temporales del mundo, o las más lentas y permanentes, de Dios?
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